MANUEL ASENSI PÉREZ – Los Años Salvajes de la Teoría (Ph. Sollers, «Tel Quel», y la Génesis del Pensamiento Post-estructural Francés)
“Los Años Salvajes de la Teoría: Ph. Sollers, ‘Tel Quel’ y la Génesis del Pensamiento Post-estructural Francés” es un análisis detallado realizado por Manuel Asensi Pérez sobre la revista “Tel Quel” y su papel fundamental en el desarrollo del pensamiento post-estructuralista francés. Publicado en 2006 por la editorial Tirant lo Blanch, el libro profundiza en cómo la revista, dirigida por Philippe Sollers, se convirtió en el epicentro de una serie de transformaciones intelectuales que redefinirían no solo la crítica literaria, sino también las concepciones filosóficas y culturales de la época. A través de esta obra, Asensi Pérez ofrece una perspectiva clara sobre el contexto histórico, social y político en el que se forjó esta corriente de pensamiento radical y vanguardista.
“Tel Quel” fue fundada en 1960 por Philippe Sollers, un escritor que, junto a su círculo de colaboradores, buscó redefinir los límites de la literatura y la teoría crítica. La revista rápidamente se destacó por su postura irreverente frente a la tradición literaria y su capacidad para desafiar las normas establecidas en el ámbito académico. En sus primeras etapas, “Tel Quel” se alineó con el estructuralismo y la semiología, adoptando las teorías de Roland Barthes, Claude Lévi-Strauss y otros pensadores clave que exploraban la relación entre lenguaje, estructura y significación. Asensi Pérez explica cómo estos enfoques fueron fundamentales para el giro que la revista tomaría posteriormente hacia un tipo de pensamiento más radical, el cual terminaría dando forma al post-estructuralismo.
En su obra, Asensi Pérez también aborda el contexto político de la época, destacando el impacto de los eventos de mayo de 1968 en la revista y su comunidad intelectual. El estallido social de ese año, con su fuerte componente de lucha de clases y cuestionamiento de las estructuras de poder, influyó decisivamente en el enfoque de “Tel Quel” y en el pensamiento de los intelectuales vinculados a ella. A partir de 1968, la revista comenzó a adoptar una postura más política, acercándose a las ideas del marxismo y, más tarde, al maoísmo, aunque de una manera crítica y cuestionadora. Este giro político también estuvo marcado por un alejamiento de las convenciones marxistas ortodoxas, lo que permitió a los miembros de “Tel Quel” reflexionar sobre las implicaciones ideológicas del lenguaje y su relación con la estructura social. Asensi Pérez destaca cómo esta fase de la revista fue crucial para la consolidación de la crítica post-estructuralista, que a partir de entonces se caracterizó por su atención a las dinámicas de poder, discurso y subjetividad.
Una de las características más relevantes de “Tel Quel” es su capacidad para incorporar y sintetizar diversos enfoques filosóficos y teóricos, lo que la convirtió en un crisol de ideas. En este sentido, Asensi Pérez se enfoca en el papel crucial que desempeñaron autores como Julia Kristeva, quien introdujo el psicoanálisis lacaniano en la revista. Kristeva, junto con otros intelectuales como Michel Foucault y Jacques Derrida, contribuyó a una reconfiguración de la teoría literaria y filosófica, desafiando las nociones de autoría, verdad y representación que prevalecían en la tradición estructuralista. El psicoanálisis, en particular, permitió una comprensión más profunda de las complejas interacciones entre el sujeto, el inconsciente y el lenguaje, lo que permitió a “Tel Quel” explorar nuevas dimensiones de la subjetividad y la identidad.
El post-estructuralismo, como corriente filosófica, se caracteriza por su rechazo a las grandes narrativas totalizadoras y su enfoque en la deconstrucción de las estructuras rígidas de significado. A través del análisis de textos, los pensadores post-estructuralistas propusieron que el lenguaje no es un medio neutro para transmitir significado, sino que está cargado de poder, ideología y contradicciones. Asensi Pérez dedica una parte significativa de su obra a explorar cómo estas ideas se manifestaron en las páginas de “Tel Quel” y cómo la revista contribuyó a la creación de un nuevo tipo de crítica literaria que cuestionaba las fronteras entre el texto y su contexto. En particular, el trabajo de Derrida, con su concepto de deconstrucción, se convierte en un pilar esencial de la revista, influyendo profundamente en su visión del lenguaje y la cultura.
Otro aspecto importante del libro de Asensi Pérez es su atención a la evolución de la revista “Tel Quel” a lo largo de los años. En sus primeros números, la revista se centraba principalmente en la crítica literaria, pero a medida que avanzaba la década de los 60, sus colaboradores comenzaron a interesarse cada vez más por la filosofía y las ciencias sociales. Este cambio de enfoque se reflejó en la incorporación de autores como Michel Foucault, quien ya en ese momento se encontraba desarrollando su teoría sobre el poder, el saber y las instituciones. Foucault, con su concepto de la “archaeología del saber”, ayudó a profundizar la crítica de “Tel Quel” hacia las formas en que el conocimiento se produce y se distribuye, subrayando la relación entre conocimiento, poder y discurso.
La figura de Philippe Sollers, como director de “Tel Quel”, también es esencial en el análisis de Asensi Pérez. Sollers, además de ser un escritor destacado, fue un teórico radical que influyó decisivamente en la dirección de la revista. Su enfoque experimental y su interés por las nuevas formas de escritura fueron claves para la propuesta estética de la revista, que se caracterizó por su deseo de romper con las convenciones literarias tradicionales y explorar nuevas formas de representar la realidad. Sollers, además, fue un defensor de una literatura política, comprometida con los cambios sociales y políticos de la época, lo que le permitió a “Tel Quel” mantenerse en la vanguardia de la reflexión intelectual durante más de una década.
El legado de “Tel Quel” y su influencia en la teoría post-estructuralista no solo se limita al pensamiento filosófico, sino que también tuvo un impacto significativo en los estudios literarios, las ciencias sociales y las humanidades en general. La revista fue un espacio de experimentación intelectual que permitió a muchos autores de la época reflexionar sobre cuestiones fundamentales como el sujeto, el lenguaje, la ideología y el poder. Asensi Pérez demuestra cómo el pensamiento post-estructuralista, desarrollado en las páginas de “Tel Quel”, sigue siendo una de las corrientes más influyentes en la teoría crítica contemporánea.
“Tel Quel” fue fundada en 1960 por Philippe Sollers, un escritor que, junto a su círculo de colaboradores, buscó redefinir los límites de la literatura y la teoría crítica. La revista rápidamente se destacó por su postura irreverente frente a la tradición literaria y su capacidad para desafiar las normas establecidas en el ámbito académico. En sus primeras etapas, “Tel Quel” se alineó con el estructuralismo y la semiología, adoptando las teorías de Roland Barthes, Claude Lévi-Strauss y otros pensadores clave que exploraban la relación entre lenguaje, estructura y significación. Asensi Pérez explica cómo estos enfoques fueron fundamentales para el giro que la revista tomaría posteriormente hacia un tipo de pensamiento más radical, el cual terminaría dando forma al post-estructuralismo.
En su obra, Asensi Pérez también aborda el contexto político de la época, destacando el impacto de los eventos de mayo de 1968 en la revista y su comunidad intelectual. El estallido social de ese año, con su fuerte componente de lucha de clases y cuestionamiento de las estructuras de poder, influyó decisivamente en el enfoque de “Tel Quel” y en el pensamiento de los intelectuales vinculados a ella. A partir de 1968, la revista comenzó a adoptar una postura más política, acercándose a las ideas del marxismo y, más tarde, al maoísmo, aunque de una manera crítica y cuestionadora. Este giro político también estuvo marcado por un alejamiento de las convenciones marxistas ortodoxas, lo que permitió a los miembros de “Tel Quel” reflexionar sobre las implicaciones ideológicas del lenguaje y su relación con la estructura social. Asensi Pérez destaca cómo esta fase de la revista fue crucial para la consolidación de la crítica post-estructuralista, que a partir de entonces se caracterizó por su atención a las dinámicas de poder, discurso y subjetividad.
Una de las características más relevantes de “Tel Quel” es su capacidad para incorporar y sintetizar diversos enfoques filosóficos y teóricos, lo que la convirtió en un crisol de ideas. En este sentido, Asensi Pérez se enfoca en el papel crucial que desempeñaron autores como Julia Kristeva, quien introdujo el psicoanálisis lacaniano en la revista. Kristeva, junto con otros intelectuales como Michel Foucault y Jacques Derrida, contribuyó a una reconfiguración de la teoría literaria y filosófica, desafiando las nociones de autoría, verdad y representación que prevalecían en la tradición estructuralista. El psicoanálisis, en particular, permitió una comprensión más profunda de las complejas interacciones entre el sujeto, el inconsciente y el lenguaje, lo que permitió a “Tel Quel” explorar nuevas dimensiones de la subjetividad y la identidad.
El post-estructuralismo, como corriente filosófica, se caracteriza por su rechazo a las grandes narrativas totalizadoras y su enfoque en la deconstrucción de las estructuras rígidas de significado. A través del análisis de textos, los pensadores post-estructuralistas propusieron que el lenguaje no es un medio neutro para transmitir significado, sino que está cargado de poder, ideología y contradicciones. Asensi Pérez dedica una parte significativa de su obra a explorar cómo estas ideas se manifestaron en las páginas de “Tel Quel” y cómo la revista contribuyó a la creación de un nuevo tipo de crítica literaria que cuestionaba las fronteras entre el texto y su contexto. En particular, el trabajo de Derrida, con su concepto de deconstrucción, se convierte en un pilar esencial de la revista, influyendo profundamente en su visión del lenguaje y la cultura.
Otro aspecto importante del libro de Asensi Pérez es su atención a la evolución de la revista “Tel Quel” a lo largo de los años. En sus primeros números, la revista se centraba principalmente en la crítica literaria, pero a medida que avanzaba la década de los 60, sus colaboradores comenzaron a interesarse cada vez más por la filosofía y las ciencias sociales. Este cambio de enfoque se reflejó en la incorporación de autores como Michel Foucault, quien ya en ese momento se encontraba desarrollando su teoría sobre el poder, el saber y las instituciones. Foucault, con su concepto de la “archaeología del saber”, ayudó a profundizar la crítica de “Tel Quel” hacia las formas en que el conocimiento se produce y se distribuye, subrayando la relación entre conocimiento, poder y discurso.
La figura de Philippe Sollers, como director de “Tel Quel”, también es esencial en el análisis de Asensi Pérez. Sollers, además de ser un escritor destacado, fue un teórico radical que influyó decisivamente en la dirección de la revista. Su enfoque experimental y su interés por las nuevas formas de escritura fueron claves para la propuesta estética de la revista, que se caracterizó por su deseo de romper con las convenciones literarias tradicionales y explorar nuevas formas de representar la realidad. Sollers, además, fue un defensor de una literatura política, comprometida con los cambios sociales y políticos de la época, lo que le permitió a “Tel Quel” mantenerse en la vanguardia de la reflexión intelectual durante más de una década.
El legado de “Tel Quel” y su influencia en la teoría post-estructuralista no solo se limita al pensamiento filosófico, sino que también tuvo un impacto significativo en los estudios literarios, las ciencias sociales y las humanidades en general. La revista fue un espacio de experimentación intelectual que permitió a muchos autores de la época reflexionar sobre cuestiones fundamentales como el sujeto, el lenguaje, la ideología y el poder. Asensi Pérez demuestra cómo el pensamiento post-estructuralista, desarrollado en las páginas de “Tel Quel”, sigue siendo una de las corrientes más influyentes en la teoría crítica contemporánea.
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