
FRÉDÉRIC LORDON – Capitalismo, Deseo y Servidumbre (Marx y Spinoza)
“Capitalismo, Deseo y Servidumbre (Marx y Spinoza)”, escrito por Frédéric Lordon, ofrece una provocadora reflexión sobre el funcionamiento del capitalismo contemporáneo desde una perspectiva filosófica y política, combinando los pensamientos de Karl Marx y Baruch Spinoza. Lordon, conocido por su enfoque original en la crítica al capitalismo, busca iluminar las formas en que el sistema capitalista logra obtener no solo la obediencia de los individuos, sino también su deseo de participar activamente en él, aun cuando pueda ser perjudicial para su bienestar. El texto se apoya en las teorías de Spinoza y Marx para explorar cómo el deseo y la servidumbre voluntaria se entrelazan en la sociedad capitalista moderna.
Lordon parte del concepto de “servidumbre voluntaria”, un término que toma de Spinoza para describir cómo los seres humanos, lejos de ser simplemente oprimidos por el sistema, colaboran activamente con su propia subordinación. Según Spinoza, los individuos actúan impulsados por sus pasiones y deseos, lo que en muchos casos los lleva a aceptar y reproducir las estructuras de poder que los dominan. Para Lordon, esta idea es clave para comprender cómo el capitalismo ha conseguido no solo la sumisión de los trabajadores, sino su implicación emocional y deseante en el sistema. El capital no se sostiene solo a través de la coerción externa o la explotación económica, sino que también moviliza los deseos de los individuos, envolviéndolos en un ciclo de deseos que ellos mismos no controlan completamente.
En este sentido, la obra establece un diálogo entre el pensamiento de Spinoza y las ideas de Marx sobre la alienación y la explotación. Para Marx, el trabajador bajo el capitalismo está alienado de su propia labor, convirtiéndose en un engranaje más dentro de un proceso productivo que no controla. Sin embargo, Lordon va más allá al señalar que, aunque los trabajadores puedan ser conscientes de esta alienación, el sistema capitalista es capaz de generar mecanismos de deseo que los mantienen vinculados a su trabajo y al consumo. Aquí entra en juego la idea de que el capitalismo no solo compra la fuerza de trabajo, sino también la “afectividad” de los individuos, haciendo que estos se involucren emocionalmente en su propio sometimiento.
Una de las principales aportaciones de “Capitalismo, Deseo y Servidumbre” es el análisis de cómo el capitalismo contemporáneo ha logrado transformar las relaciones laborales a través de lo que Lordon denomina “captura afectiva”. En lugar de la explotación abierta y directa que Marx describía en el siglo XIX, el capitalismo actual se basa en formas más sutiles de control, donde las empresas buscan generar lealtad y compromiso emocional de los empleados. Los individuos, lejos de sentirse simplemente explotados, encuentran sentido y satisfacción en su trabajo, aun cuando sus condiciones sean precarias. Lordon explica que esta es una forma sofisticada de servidumbre voluntaria, donde el deseo de los trabajadores se alinea con los intereses del capital.
El libro también examina la relación entre deseo y consumo en la era del capitalismo avanzado. Lordon argumenta que el capitalismo ha conseguido que los individuos no solo trabajen para el sistema, sino que también consuman de manera voraz, buscando satisfacer deseos que el propio sistema genera continuamente. Este ciclo de producción y consumo, impulsado por un deseo insaciable, es lo que mantiene en marcha la maquinaria capitalista. Sin embargo, para Lordon, esta dinámica no se limita a la mera satisfacción de necesidades materiales, sino que se extiende a la esfera afectiva y simbólica. Las personas buscan en el consumo una forma de realización personal, lo que refuerza aún más su vinculación emocional con el sistema.
En su conclusión, Lordon retoma el pensamiento de Spinoza para ofrecer una visión crítica sobre la posibilidad de liberarse de esta servidumbre voluntaria. Aunque el capitalismo ha conseguido dominar los deseos de los individuos, el filósofo sugiere que la clave para superar esta subordinación reside en la capacidad de las personas para comprender sus pasiones y reorientar sus deseos hacia formas de vida más autónomas y colectivas. Esta “liberación del deseo”, en términos spinozistas, implicaría un proceso de concienciación y emancipación, tanto individual como colectiva, donde los sujetos puedan escapar de las dinámicas que los atan emocionalmente al capital.
“Capitalismo, Deseo y Servidumbre” es un libro que desafía las concepciones tradicionales sobre el poder del capitalismo y la resistencia. Lordon, a través de su original combinación de Marx y Spinoza, ofrece una reflexión profunda sobre cómo el sistema no solo explota económicamente, sino que también captura los deseos y las pasiones de los individuos, haciendo de la servidumbre algo casi voluntario. Es una obra imprescindible para aquellos interesados en la filosofía política contemporánea, la crítica del capitalismo, y las complejas relaciones entre poder, deseo y subjetividad en el mundo moderno.
